miércoles, 18 de diciembre de 2013






Porque queres que la luna nos june por separados  te vas escondiendo debajo de la copa de los arboles. Estas un poco borracho ya y yo me aprovecho para hacerte derrapar, que de pronto lleguemos hasta la esquina y pedirte un beso para que abandones la esclavitud al menos un poco, mientras pensamos que hubiese sido mejor comer en casa que ir al Mc a hacer pose.


Igual la luna sabe que mi deseo no se va,  no puedo sostener el personaje mucho tiempo mientras caminamos y te miro andar unos pasos delante de mí. Tu espalda está un poco traspirada por el calor que no cesa. Tu musculosa rotosa-sexy-salvaje, qué cosa más bonita. Mi deseo es porfiado, de los que nacen de cosas podridas, pero yo se que tiene aroma como de flores igual. Tengo ganas de morderte y me acerco un poco hasta alcanzar con mi boca tu espalda, vos intentas esquivarme pero te roso igual y te pellizco con mis dientes. Te enojas, me reclamas que no lo vuelva a hacer. Yo te lo prometo, pero vos sabes que es mentira, que apenas todo VOS me vuelva a provocar voy a incurrir con mis dientes sobre vos otra vez, quizás, el cuello. Para que te calmes te digo que la luna no sabe, que no vio nada, pero yo se que sí. 

lunes, 17 de junio de 2013








Me casaría con vos en una de esas tribus Amazónicas con personas que andan desnudas pero pintadas con girones de colores, borracho de mezcal hasta el vómito. Ahora cierro los ojos y te veo con el cigarrillo de flor en la boca listo para curar todo, justo después del “sí quiero”.

jueves, 13 de diciembre de 2012



















Recuerdos y botellas vacías  fue lo mejor que dejo aquella fiesta. Mientras limpio las manchas de vino que quedaron en el piso, se me ocurre pensar que tal vez me detuve en vos demasiado tiempo.

miércoles, 28 de noviembre de 2012



En la sesión de ayer la Lic. Algaramos me pregunto ¿Por qué boicoteo mis relaciones? Cuando le dije “no sé”, ella se acerco a mí, inclinándose apenas hacia adelante, fijo su mirada en mis ojos y me dijo que una relación de a dos no solo implica hacerse cargo de uno mismo, sino, también, de un otro, y que poder hacerlo implica un proceso de maduración, que me pregunte si yo quería madurar, eso me dijo. 

miércoles, 21 de noviembre de 2012


Este balcón con vista a las terrazas de la ciudad, finalmente tiene sentido si las miro con vos.

domingo, 18 de noviembre de 2012



Hoy podría a ver sido un día de sol, para no pensar, para perderme en  las islas del Paraná y no pensar, quedarme en la lontananza encandilada y no pensar, pero no: llueve. Yo miro el agua caer desde el balcón y la siento aburrida sin vos. El balcón se inunda y hace flotar los filtros de los puchos de anoche. “Algunos son de los que te fumaste vos”, pienso y me dan ganas de abrir un porroncito por más que no haga ese calor digno de porron.
Por momentos pienso que nuestro precario juego de noviecitos hubiese merecido su final de película indi: subirme a un taxi y seguirte o gritarte que no te vayas en plena avenida, pero claro, con el charme clásico de una estrella de hollywood.
Me hubiera gustado que se jugaran otras cartas, no se... menos cuatro de copa y mas espada, o que hoy haya sol, pero no, sigue lloviendo.

sábado, 17 de noviembre de 2012


Hoy limpie el balcón (en ocho meses, que es el tiempo que vivo en este departamento). Con la única intención de sentarme ahí a fumar con vos, pero no viniste. No me decepciona, no. Ahora escucho Felete y destapo mi tercer porron.

jueves, 20 de septiembre de 2012








Que llueva cómo está lloviendo justo cuando vos sos vos sin mí, me hace arañar con los dedos el barro que se formo en el balcón por no barrerlo nunca. Si esta lluvia hubiese caído en agosto, me pregunto si el balcón estaría limpio y  Bessie Smith no sonaría a todo volumen la mayor parte del día. 

jueves, 24 de mayo de 2012










Me gustaría tener sus ojos acá, su pecho acá, sus brazos acá. Sentarnos en el suelo en pose india y tener su cabeza sobre mis piernas. Dejar que el viento nos despeine, ver como se enmaraña la tierra entre sus rulos revueltos de tarde.
Sentirnos aborígenes con nuestros pies descalzos sobre el pasto. Toda la ciudad atrás, ya distante. Pensarnos salvajes lejos de los taxis y los colectivos y la gente, sobre un parque de sutil arquitectura neo.  Vernos como analfabetos liberados de las burocracias de las civilizaciones, mientras nos miramos y caemos en una cursilería de gestos, de pequeñas miradas cómplices; sumergidos en un pedacito de verde perdido entre tanto urbanismo enardecido.
Enredar mis dedos en sus pelos, ver como se anudan mis manos en sus rulos, sentirme atrapado, que él me reclame que lo suelte. Todo irá sucediendo mientras esa señora pasea al perro, ese rio crecido trae ramas, este árbol se desprende de una hoja. 

lunes, 21 de mayo de 2012







Finalmente la noche se oye como es o como tiene que ser, por se desgarra la vos sabia de Susy y Santiago golpea sobre el cajón de sus lamentos. Todos están embriagados de sutiles girones de colores. El miedo a que se acabe la superficie desaparece porque tocamos el cielo mientras bailamos y nos reímos, nombrar el horizonte seria demasiado. Caemos en una ronda india, la fogata es el canecalon que está en el centro y todos danzamos al compas de la historia que nos toca en suerte trans-itar. A Karla le brillan los ojos como si se le reflejara la luna. Todo sucede en una casa, que está adentro de un barrio, que está adentro de una ciudad, que esta dentro de mi cabeza, como si fuese una Mamushka.